Elija sus bombillas para ahorrar energía

Hoy en día, ahorrar energía en términos de iluminación está al alcance de todos siempre que se elijan las bombillas adecuadas. Muchos de los modelos disponibles en el mercado no solo ahorran energía sino que también proporcionan un muy buen confort de iluminación.

Pero entre todas las ofertas de bombillas, a veces es difícil navegar y tomar la decisión correcta. Algunos consejos para ver más claramente entre bombillas LED, fluorescentes compactas y halógenas.

Cómo elegir tus bombillas para ahorrar energía y estar bien iluminado

Los diferentes tipos de bombillas de bajo consumo

La bombilla LED

La bombilla de luz de diodo emisor de luz (LED) es la bombilla de mayor eficiencia energética. Su eficiencia de ahorro de energía es un tercio mayor que las bombillas fluorescentes compactas, que además consumen poca electricidad. La tecnología LED también es prometedora en términos de iluminación aún más económica en el futuro. En el comercio, la etiqueta de las bombillas LED debe mencionar su clasificación A + o A ++ para asegurarse de que se trata de una bombilla de bajo consumo.

Por otro lado, las bombillas LED tienen una vida útil muy larga, del orden de las 40.000 horas, aproximadamente 10 años como mínimo. Uno de los puntos negativos de los LED es su precio todavía elevadísimo, de 10 a 20 euros, aunque la inversión en este tipo de bombillas de gran eficiencia energética se amortiza rápidamente dada su larga vida útil, mucho más. a otras bombillas.

La calidad de la iluminación que emiten las bombillas LED es de muy buena calidad y además permite regular su variación según la luz del día o la presencia o no de una persona en una habitación por ejemplo. La otra ventaja de la bombilla LED es iluminar inmediatamente un lugar cuando está encendida y no aumentar gradualmente la potencia. Esta ventaja permite un uso máximo en áreas de tráfico. Las bombillas LED pueden emitir luz blanca o de colores.

Sin embargo, tenga en cuenta: la Agencia Nacional de Seguridad Alimentaria, Ambiental y de Salud Ocupacional (ANSES) recomienda evitar el uso de este tipo de bombillas en lugares frecuentados por niños o en objetos que utilizan (juguetes en particular), así como para personas sensibles a la luz, debido a una posible toxicidad de la luz azul liberada en la retina. Sin embargo, las bombillas LED que se venden al público en general están evolucionando muy rápidamente para evitar este problema.

La bombilla fluorescente compacta

La bombilla fluorescente compacta (CFL), también llamada bombilla de bajo consumo o bombilla de bajo consumo, puede consumir en promedio cinco veces menos energía que una bombilla convencional. Su vida útil es de entre 6.000 y 12.000 horas. Este tipo de bombilla se enciende gradualmente. Por tanto, es preferible en habitaciones que permanezcan iluminadas durante mucho tiempo. Incluso si no logran la eficiencia de las bombillas LED en términos de ahorro de energía, las lámparas fluorescentes compactas menos costosas son una buena solución económica.

La bombilla incandescente halógena de "alta eficiencia"

La bombilla halógena clásica está siendo sustituida cada vez más por la bombilla halógena incandescente de "alta eficiencia", también llamada bombilla halógena ecológica, que consume entre un 20 y un 30% menos de energía y tiene la misma eficiencia que la Bombilla halógena de antigua generación en cuanto a color y luz. La vida útil de la bombilla halógena eco también es más larga: de 1 a 2 años, 3 veces más que una bombilla halógena convencional. Sin embargo, las bombillas halógenas ecológicas consumen mucho más que las LED o las fluorescentes compactas, lo que las sitúa en términos de consumo energético tanto en la categoría C como en la D. Además, las lámparas halógenas ya no se fabricarán ni se fabricarán. , ni comercializado, en Europa desde septiembre de 2018.

Directrices para elegir las bombillas de bajo consumo adecuadas

Para asegurarse de elegir una bombilla de bajo consumo que satisfaga sus necesidades de iluminación, es importante comprender toda la información mencionada en el embalaje de los diferentes tipos de bombillas. Son estas indicaciones, según le aconseja la Agencia de Gestión de Medio Ambiente y Energía (ADEME), las que le permitirán realizar la mejor compra.

Etiqueta energética

La etiqueta energética, obligatoria para todas las bombillas, indica su clase de eficiencia energética. Desde A ++ para las bombillas más eficientes hasta E para las menos buenas. Las lámparas compactas fluorescentes y LED se clasifican de A a A ++. Los halógenos entre C y D. Esta etiqueta también menciona el consumo de la lámpara en kilos vatios hora por 1000 horas de encendido.

Flujo luminoso

El flujo luminoso de las bombillas debe mencionarse en el embalaje. Te permite conocer la cantidad de luz difundida, como los vatios de las bombillas incandescentes antiguas. La unidad de flujo luminoso es "lúmenes". La cantidad de luz producida por las bombillas de bajo consumo ya no es directamente proporcional a su potencia. Por ejemplo, la potencia de 40 vatios de una bombilla convencional corresponde a un flujo luminoso de 440 lúmenes para bombillas de bajo consumo.

La temperatura de la luz (o su color)

Una bombilla puede difundir una luz cálida, más destinada a salas de estar y dormitorios, o una llamada luz dinámica más adecuada para cocinas, oficinas o baños. Es la "temperatura de color" expresada en grados Kelvin (K) la que determina el color de la luz. Cuanto menor sea esta temperatura, más cálida será la luz y viceversa.

Etiqueta ecológica europea

La Etiqueta Ecológica Europea se otorga a las bombillas que garantizan su calidad de uso así como sus características ecológicas, incluido su menor consumo energético.

Artículos Relacionados